[SARA SOFÍA BALLESTEROS ÁLVAREZ]

Mi peor experiencia fue que al llegar a un hotel con mucho renombre y de los que se identifican por la calidez en su servicio, pero al bajar del vehículo al lobby se percibía mucha gente en movimiento, señalando a distintas partes y un ruido de todas las voces de esa gente en movimiento todo un caos. Cuando llegue a realizar mi check in recibí un “Bienvenida a casa Srita Sofía” con una recepcionista viendo la pantalla de su computadora y con media sonrisa en la boca, fingida tal vez hasta forzada.

De inicio esto fue una decepción y muy mala sorpresa, aunado a esto por hospedarte en ese hotel te asignan un mayordomo personal con el fin de hacer de tus vacaciones un plan del que no debas preocuparte pero yo, egresada de turismo, decidí adelantarme y hacer mis reservaciones semanas antes de mi viaje, quería tomarme el tiempo de planear minuto a minuto mi estancia y así poder disfrutar y aprovechar lo mejor posible.

Como mi habitación no estaba lista cuando llegue, para variar, me presentaron a quien sería mi mayordomo durante mi estancia. Quien estaba atendiendo a otras personas y solo volteaba como queriendo saludar pero al mismo tiempo despedirse…..definitivamente estaban sobrepasados. Cuando le dije a mi mayordomo que ya tenía un plan y se lo mostré en mi celular hasta con códigos de confirmación fui su salvación y respiro porque solo me dijo ¡ahhhhh pues bueno, a disfrutar familia ya están en casa! Y se fue.

Me hizo sentir ignorada por completo.

Por el contrario mi mejor experiencia de servicio fue con el Chef de uno de los restaurantes del mismo hotel, definitivamente ama mucho lo que hace y se nota.

Un día de mi hospedaje en el hotel estábamos disfrutando de las instalaciones y comente que quería coco fresco o en helado o en algo pero quería coco, ¡estábamos en la playa! y sin saber que era uno de los chefs del hotel percibimos que nos escucho. Seguimos nuestro plan.

Días después, tuvimos nuestra cena en el restaurante en dónde él era el especialista. La cena estuvo espectacular pero mi postre fue entregado personalmente por el chef, era una obra de arte estaba tan bien hecho que no quería comerlo pero olía espectacular y cuando me lo entrego me dijo.- Aquí está el coco fresco que quería señorita, espero lo disfrute!

Se le veía de lo más satisfecho, contento y, aparte de todo, el sabor era impresionante.