[DAFNE ROCHA]

Una de las peores experiencias de servicio que he tenido fue en mi primer viaje sola cuando me iba terminando prepa a EUA por unos meses, hice escala en el aeropuerto de Atlanta, hablaba inglés no tan bien y al momento de dejar mi equipaje para el transbordo una mujer que recibía las maletas me habló gritando, yo no entendí casi nada de lo que me dijo, y me fui muy asustada, cada vez que pienso en Atlanta o que alguien me lo menciona, pienso en ese suceso tan incómodo. Una de las mejores experiencias de servicio que he tenido la he brindado yo, y la contaré pues me hace mucho clic con lo que acabo de ver y leer en el curso; trabajaba en uno de los restaurantes más concurridos de todo Walt Disney World, ese día era Hostess, una pareja lo vió y quería comer ahí pero no tenían rsv y era un día bastante concurrido, pero tenían su rsv en otro restaurante al otro lado del parque, para que no les hicieran cargo por “no show” debían ir allá a cancelarla y luego ya podían volver, pero no se les aseguraba que hubiera mesa disponible, ya que en ese momento sí había una pero si se iban podía perderse; los vi tan ilusionados por comer ahí que hablé con mi gerente y le comenté la situación, me dijo que ibamos a tratar de apartarla (pese a que eso no era posible en esas situaciones) y que fueran y volvieran, les comenté eso y que me buscaran cuando regresaran, pasó casi 1 hr, volvieron y los llevé a su mesa, tratamos de darles una de las mejores mesas, y cuando se estaban acomodando me dijo el esposo “muchas gracias, en verdad teníamos tantas ganas de comer aquí, pues el lugar es hermoso y venimos a celebrar esto (me enseña un pin que decía que celebraban que la esposa había vencido al cáncer), se me llenaron los ojos de lágrimas, pues sin yo saber lo que significaba para ellos comer en ese lugar sentí la corazonada de que estaba en mis manos ayudarles.