La dinámica y las tendencias del mercado están inmersas en un complejo entramado de relaciones en que los oferentes, los demandantes y los que juegan influidos por una serie de factores políticos, económicos, sociales, bióticos, científicos, tecnológicos y culturales.
Entre más amplia sea nuestra capacidad de observar y absorber lo que sucede en nuestro entorno, más claro podremos percibir los cambios para prepararnos, anticiparnos y transformarlos a nuestro favor.
Contenido
En este artículo reflexionaremos sobre las megatendencias que nos permitirán comprender hacia dónde se mueve el mundo y qué nos influye para crear experiencias de alto valor holístico y personalizado.
Las primeras preguntas que me hago cada vez que pienso en el futuro suelen ser:
¿Tenemos un futuro común?
El concepto de desarrollo sostenible es un punto de llegada y de partida.
¿Crecemos al unísono?
Las tendencias demográficas nos plantean cuánto y cómo está creciendo la sociedad humana.
¿Nos alcanzará el mundo?
Las tendencias medio ambientales nos advierten que hemos de replantear nuestras formas de producción y consumo.
¿Qué tan inteligentes estamos siendo?
Las tendencias científicas y tecnológicas nos explican que nuestra capacidad creativa es infinita.
¿Seguiremos yendo de aquí para allá?
Las tendencias de migración y turismo nos llevan a encontrarnos como seres móviles y flexibles.
Las tendencias en su conjunto, nos ayudan a saber que el mundo ya no funciona en cajitas, sino en redes en las que todos los ámbitos del quehacer humano se comunican y se afectan unos a otros.
¿Tenemos un futuro común?
Tal vez el asuntos más relevante y significativo de los cambios que están marcando el presente y seguirán marcando el futuro de la dinámica y tendencias del mercado, se relaciona con el concepto de desarrollo sostenible planteado en el informe de Brundtland de 1987, que se considera como punto de llegada o de partida de una nueva forma de comprender el sistema biocultural y parece estar convirtiéndose en una visión compartida que orienta el discurso social, empresarial y político.
La noción sistémica que aporta la visión de desarrollo sostenible, contempla los efectos potenciadores del desarrollo, tanto en su capacidad constructiva como destructora de la vida en el planeta, pues la potencia no es una realidad, sino una fuerza impulsora. El concepto de sostenibilidad se ha aprovechado para cuestionar los paradigmas de relación entre las personas, las culturas, la economía y la biodiversidad; entre la justicia social, las actividades productivas y los impactos medioambientales, y plantea la corresponsabilidad de nuestro futuro común como el eje de la gobernanza y la gobernanza como la clave para sostener la vida.
Es cierto que la visión de desarrollo sostenible deriva de la conciencia de que los desequilibrios medioambientales provocados por la acción del hombre y la mujer, para no dejar fuera a nadie, puede provocar una crisis catastrófica, lo que han hecho necesario y urgente llevar el discurso a la práctica.
A finales de 2000, después de una serie de conferencias, cumbres y disertaciones generadas por el cambio de milenio, los líderes del mundo se reunieron en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y suscribieron la Declaración del Milenio en la que se plantearon ocho objetivos, que de acuerdo con el PNUD, fueron evaluados en 2015 de la siguiente manera:
- A nivel mundial, la cantidad de personas que viven en pobreza extrema se ha reducido en más de la mitad.
- La cantidad de personas de la clase media trabajadora que vive con más de 4 dólares por día se ha triplicado entre 1991 y 2015.
- El porcentaje de personas con nutrición insuficiente en las regiones en desarrollo cayó a casi la mitad desde 1990.
- La cantidad de niños en edad de recibir enseñanza primaria que no asistió a la escuela cayó a casi la mitad a nivel mundial.
- La tasa mundial de mortalidad de niños menores de 5 años ha disminuido en más de la mitad.
- Desde 1990, la tasa de mortalidad materna ha disminuido en un 45% a nivel mundial.
- Se han evitado más de 6,2 millones de muertes causadas por paludismo entre los años 2000 y 2015, principalmente de niños menores de 5 años de edad en África subsahariana.
- Las nuevas infecciones del VIH disminuyeron en aproximadamente 40% entre 2000 y 2013.
Ese mismo año, se plantearon los Objetivos de Desarrollo Sostenible como parte de la agenda 2030 de los países miembros de la ONU, se han ido adoptando e impulsando por parte de gobiernos, organizaciones y personas más ocupadas que preocupadas por el futuro, quienes han generado acciones y programas de cooperación internacional y de acción local tendientes a plantear soluciones concretas para proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad.
Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, y sus 169 metas son resultado de las aspiraciones mundiales y se conciben como un asunto de carácter integrado e indivisible, de alcance mundial y de aplicación universal, que tienen en cuenta las diferentes realidades, capacidades y niveles de desarrollo de los diferentes países y respetan sus políticas y prioridades nacionales.
Los avances hacia el logro de estos objetivos es cada vez más evidente. Lo que comenzó como un discurso o una declaración, se ha ido insertando en la acción, y aunque hay mucho por hacer, reconocemos que las palabras forjan el futuro y los objetivos claros, nos conducen a donde nos proponemos.
¿Crecemos al unísono?
Para el año 2030, se espera que la población mundial alcance más de 8 mil millones de personas y para el 2050 habrá casi 10 mil millones de humanos en el mundo.
La mayor parte de este crecimiento será en países con economías emergentes o en desarrollo y el ritmo de crecimiento será diferente en distintas regiones del mundo. Por ejemplo, mientras que en Europa, se espera que continúe la reducción de la natalidad, en Latinoamérica, se espera que se mantengan en cierta medida las tasas de crecimiento actuales.
Sin embargo, los cambios demográficos provocarán un fuerte impacto en el comportamiento de la sociedad y la economía global y local.
Innovación educativa
Desde mi punto de vista, el cambio que estamos viendo en los modelos educativos que proponen fórmulas más flexibles, que promueven un aprendizaje más significativo y personalizado basado en la experiencia de cada grupo y cada aprendiz, niño o viejo, es uno de los más significativos.
El reconocimiento de las inteligencias múltiples y el uso de metodologías que impulsan el desarrollo de conocimientos, habilidades y actitudes, así como el aprovechamiento de las tecnologías y plataformas de aprendizaje en línea o modelos mixtos, impulsará la movilidad social y la autonomía, lo que representa retos importantes para el sistema, pues esta perspectiva rebasa las fórmulas tradicionales de pensamiento y de control. Estamos aprendiendo a aprender nuevas formas de aprender y esto marcará el futuro de manera contundente.
Movilidad social
Así, en los países emergentes se espera un crecimiento importante de las clases medias en las próximas décadas, lo que generará personas más exigentes, incrementará el desarrollo de negocios y provocará una mayor participación ciudadana en las decisiones públicas y mayores presiones a las instituciones (públicas y privadas) hacia la eficiencia, la transparencia y la responsabilidad de sus impactos tanto en términos ecológicos, como de distribución de beneficios económicos, culturales y emocionales.
Inclusión y equidad
También se espera que la discriminación y los estigmas relacionados con aspectos de discapacidad física, mental, sensorial, condición étnica o preferencias sexuales o diferencias de cualquiera otra índole, se reduzcan. Seguirán desarrollándose y adoptándose medidas que beneficien el respeto y obliguen a la negociación de espacios de expresión, permitiendo la participación plena e igualitaria, aunque diferenciada de las personas.
Esto significa que podemos adaptar espacios que habiliten a las personas a vivir plenamente teniendo en cuenta sus necesidades personales.
Participación de la mujer
La mayor participación de las mujeres es una tendencia que viene fuerte desde mediados del siglo pasado, incluso antes, y en el futuro próximo podríamos esperar que ya no se vinculará con cuadrar cifras de igualdad, sino con infundir un sentido de pertenencia e inclusión a través de la transformación cultural y social, que permitirá a hombres y mujeres desarrollarse en igualdad de derechos, materializando políticas y espacios que promuevan la conciliación de la vida familiar, personal y laboral bajo un concepto de corresponsabilidad entre el Estado, la sociedad en su conjunto y cada persona en lo particular.
Generaciones emergentes
Lo jóvenes milenials, que por cierto ya no son niños, y los niños de la generación Z, nacidos entre los 80 y principios de los 2010, promoverán grandes cambios en las tendencias de consumo y estándares de convivencia social en los próximos años, provocando mayores demandas en materia tecnológica y mayor independencia, vinculada con una menor lealtad a un estilo de vida preestablecido.
Incluso se espera una mayor proclividad al uso temporal de inmuebles y servicios en arrendamiento en lugar de adquirirlos en propiedad, a ser clientes menos fieles a las mismas marcas o los mismos lugares, y a la búsqueda de experimentar continuamente con nuevas propuestas y soluciones.
El rol habilitador de las nuevas generaciones con mejores competencias tecnológicas y habilidades de aprendizaje y de liderazgo va a influir de manera significativa en el cambio de modelos de gestión y seguirán modificando los conceptos de autonomía, soberanía, autodeterminación y corresponsabilidad más allá de las fronteras.
Edad promedio
La disminución de la tasa de fertilidad combinada con una mayor expectativa de vida, darán como resultado la mayor participación de adultos mayores en la estructura demográfica.
La esperanza de vida que pasó de 34 años en 1913 a 67 en el cambio de milenio, seguirá aumentando. Para el 2050 se espera que más de la tercera parte de la población europea y al menos la cuarta parte de la población de la mayoría de las regiones del mundo serán de mayores de 60 años.
Algunos dicen que la población envejece, otros que los adultos mayores rejuvenecemos y la llamada sillver economy, o economía plateada no es solo un asunto de sumar años, sino de comprender que la edad está generando más juventud acumulada y que los adultos mayores tendremos una vida más activa y productiva.
Organizaciones civiles
La influencia de las organizaciones civiles seguirá teniendo cada vez más influencia tanto en asuntos vinculados con los derechos humanos, la economía y el cuidado del medio ambiente como en la participación de la sociedad en la toma de decisiones de lo público desde sus diferentes ámbitos de interés.
Las técnicas y métodos de planificación participativa seguirán evolucionado de manera progresiva como se ha mostrado que viene sucediendo en las últimas décadas y se complementarán cada vez más con la creciente disponibilidad de herramientas digitales y el interés de personas con mayores conocimientos, con mejores habilidades y con actitudes más participativas.
Urbanización acelerada
Las ciudades seguirán creciendo más rápido que las zonas rurales lo que aumentará la demanda de servicios urbanos.
La ONU, prevé que para el 2050 el 68 % de la población mundial vivirá en ciudades, lo que originará múltiples espacios para lograr una mayor coordinación intermunicipal e interurbana.
¿Nos alcanzará el mundo?
El aumento de ingresos y la urbanización generan y generarán cambios importantes en los hábitos de consumo de recursos.
Por ejemplo, según proyecciones del Banco Mundial, el aumento de la población hará necesario producir al menos un 50% más de alimentos para el año 2050 para sostenernos y la FAO, sostiene que en los países en desarrollo aumenta aproximadamente 16 k por persona al año.
La ganadería es responsable del 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero por la producción de emisiones de metano en la digestión de los rumiantes y óxido nitroso por el estiércol, y hasta ahora el consumo de carne tiende a aumentar en medida que crecen los ingresos de las personas.
Además, mientras que para producir un kilo de carne de vaca se necesitan 15 mil litros de agua, para producir un kilo de manzana se requieren solo mil y para un kilo de lechuga unos 15.
De no implementar medidas alternativas, la destrucción de los bosques para favorecer la ganadería y la agricultura y obtener madera, no solo no resolverá la demanda de recursos sino empeorará las condiciones de vida de quienes continúen viviendo en zonas rurales.
Manejo forestal
En los países en desarrollo, se espera que se implementen programas de repoblación biótica, protección y aprovechamiento forestal apoyados por el desarrollo de las ciencias forestales y biológicas, orientados a la inclusión de comunidades indígenas y rurales, así como a los pequeños y medianos productores que habitan en zonas forestales, ofreciéndoles la posibilidad de mejorar sus prácticas de producción y transformación, así como lograr cadenas de suministro y distribución más ágiles para lograr mejores oportunidades de aumentar sus ventas y su calidad de vida al tiempo que se protege la biodiversidad y se asegura la absorción de dióxido de carbono y la producción de oxígeno.
Agua fresca
La disponibilidad de agua de buena calidad sufre como consecuencia de la sobreexplotación, la gestión inadecuada y la descarga de residuos en las cuencas y costas, así como la mala infraestructura hídrica, tanto urbana como productiva.
También se prevé un déficit del 40 % en el abastecimiento de agua dulce para el 2030 y para 2050 siete mil millones de personas padecerán escasez de agua si la tendencia no se revierte.
Esta situación está abriendo oportunidades de inversión para empresas que abordan de forma específica la gestión del agua, su escasez y su calidad.
Alimentación consciente
Los movimientos ambientalistas seguirán influyendo de forma importante los mercados y se espera que el llamado consumo verde siga creciendo de forma exponencial.
Como ejemplo, las principales compañías cárnicas y lácteas, que están pendientes de esta evolución del mercado fortalecen la oferta de leches de origen vegetal producido con soja, almendra, avena y otras alternativas y se espera que su producción y consumo sigan creciendo.
Estamos viendo el crecimiento del diseño de alimentos personalizados. Hay empresas que incluso analizan el AND, de las personas para proveerles una dieta que propone un consumo de carbohidratos y proteínas a su exacta medida. Cada vez más y en todos los ámbitos reconocemos que la individualización es clave para el desarrollo colectivo, porque cada persona tiene necesidades particulares que no dependen solo de caprichos, sino de conformaciones biológicas y sociales.
Calidad certificada
Las certificaciones sociales y ambientales tendrán cada vez más valor agregado, influirán en la selección de productos y servicios, profundizarán cada vez más en las cadenas de suministro para llegar al origen de las materias primas, evaluando las políticas sociales y ambientales en cada etapa desde la extracción o cultivo, hasta la entrega de los bienes y servicios a los clientes finales.
En la industria agroalimentaria se reconocen 4 principales tipos de certificaciones:
- Los que valorizan la calidad asociada a los lugares en los que se producen los alimentos utilizan indicaciones geográficas denominaciones de origen o marcas colectivas.
- Los que valorizan aspectos étnicos y sociales en la producción y comercialización que se relacionan con el comercio justo.
- Los que valorizan la relación de las prácticas de cultivo por su relación con la salud individual o familiar de los consumidores
- Los que valorizan la relación de la producción con sus impactos en el medio ambiente que miden la huellas ecológicas, la huellas de carbono y las huellas hídricas… alrededor de los cuales todavía quedan muchas discusiones metodológicas para ajustar los enfoques y criterios de clasificación y jerarquización.
También hay nichos muy particulares que reconocen productos amigables con las aves o dolphin safe, que son impulsados por sectores o grupos específicos.
Menos dinero
Seguirá reduciéndose el uso de dinero en efectivo mientras crecen las transacciones electrónicas y el uso de criptomonedas y block chains, generando transacciones más eficientes y confiables, así como la reducción de los costos de intermediación, la simplificación de los programas de lealtad y el conocimiento específico de los hábitos de los consumidores.
Más calor
El reconocimiento de los efectos del cambio climático ha generado la urgente necesidad de reducir las emisiones de carbono, lo que está marcando el ámbito empresarial, industrial y doméstico. Hoy estamos conscientes de que tenemos que cambiar la forma en que actuamos para evitar esta situación que tiene enferma a la tierra.
Energías limpias
La revolución de las energías renovables, que están experimentando un acelerado crecimiento, y son cada vez más accesibles, se consideran el mejor antídoto para contrarrestar el cambio climático, además de que su uso promoverá el desarrollo de comunidades más sostenibles, más autónomas y más saludables.
Estamos aprendiendo a producir nuestra propia energía, a dejar de depender de organismos centrales para producir esta energía que nos hace funcionar como personas, como industrias, como grupos, como sociedad, casi cósmica.
En el ámbito del transporte, por ejemplo, los fabricantes del sector automotriz como aeronáuticos y navieras están marcado tendencias en los últimos años tanto en términos de velocidad, seguridad, eficiencia y limpieza energética. Existen movimientos crecientes hacia la logística justa y responsable, que son impulsados por el crecimiento del consumo sostenible, la digitalización y la globalización.
¿Qué tan inteligentes estamos siendo?
El crecimiento exponencial del uso de TIC, en todas las cadenas de suministro, incluyendo productos agroalimentarios, didácticos, entretenimiento y uso del tiempo libre y ocupado, se suman de forma escalable para presentar soluciones ágiles y flexibles que definitivamente no caben en las mentes cerradas.
Seguirá en expansión el desarrollo de tecnologías de realidad virtual y aumentada en sectores como la educación, el diseño, las industrias manufactureras, el entretenimiento, el turismo, la mercadotecnia y la medicina.
Las plataformas digitales se seguirán expandiendo en todos los sectores, actividades económicas y sociales transformado radicalmente la forma como nos enteramos, nos comunicamos, hacemos negocios, comprendemos el tiempo y el espacio, tomamos decisiones e incluso reaprendemos a ser comunidad.
Reconfiguración de la industria
La redefinición de lo que es competividad va a seguir cambiando muchos paradigmas.
En el panorama industrial seguirán formándose alianzas que desdibujen los límites sectoriales y territoriales, lo que ya está sucediendo.
Ya no actuamos ni pensamos en cajitas porque sabemos que los nuevos valores aparecen en las intersecciones y en las vinculaciones, donde los espacios son más difíciles de etiquetar y donde las antiguas clasificaciones ya no son vigentes.
Lo de hoy y del futuro no es entrar en catálogos rígidos, sino pensar y actuar en red, para identificar los nodos y sus vínculos, en los que se encuentran las oportunidades de un desarrollo innovador, tanto de la oferta como de la demanda.
Les propongo unos casos que además de mostrarnos esta reconfiguración de las industrias, nos demuestra que las tendencias toman su tiempo: ¿Disney es una operadora de parques temáticos, un vendedor de juguetes, un productor de películas, tiene un core business o muchos corazones? ¿Le ubicamos como una empresa cultural, de entrenamiento, de turismo? ¿Amazon es una tienda en línea, una productora de libros, un intermediario logístico, un productor de insumos? ¿es mayorista o minorista? ¿Airbnb es una arrendadora de casas, una comercializadora de cuartos, una promotora de destinos, una turoperadora, una certificadora de guías locales que hoy ofertan todo eso, a la vez?
Automatización
Los avances en automatización a través de la robótica, la impresión tridimensional y la inteligencia artificial están irrumpiendo en los mercados laborales y durante las próximas décadas va a seguir creciendo. Tal vez signifique que la producción basada en la comunidad siga aumentando descentralizada de las grandes empresas manufactureras.
Al desdibujarse la frontera entre el trabajo de humanos y máquinas tendrán que realinearse las normas sociales y replantearnos los conceptos de calidad de vida y personalización, de eficiencia, de quién y cómo trabaja y cómo nos distribuimos los ingresos de lo que producimos como humanidad, como generación.
Salud
El empleo de nuevas tecnologías ya está utilizándose para mejorar la atención quirúrgica y para permitir a las personas tener mejor control de su salud a partir de mecanismos predictivos, personalizados, proactivos y participativos.
Además de la sofisticación y accesibilidad de prótesis corporales, la edición del ADN, y las incrustaciones de chips y nano robots de nuestro cuerpo, que se encuentran ya en fases de prueba, pueden convertirse en herramientas que transformen todas las tendencias preconcebidas hasta ahora.
Ciudades inteligentes
Se espera el crecimiento de ciudades inteligentes que aprovecharán las tecnologías para mejorar su desarrollo sostenible, que se orienten a lograr mayor accesibilidad, agilidad, comodidad, seguridad física y ambiental, y generar oportunidades para los ciudadanos.
El posicionamiento de construcciones verdes seguirá al alza. El mercado inmobiliario utilizará dispositivos cada vez más eficientes, mejorar aislamientos en los lugares con climas extremos para evitar el uso de calentadores y aire acondicionado, uso de sensores que permitan conocer y reprogramar el uso de recursos compartidos tanto en edificios nuevos como en la remodelación de los más antiguos.
Internet de las cosas
Para que se den una idea, el portal de estadísticas Statista, preveía, hace algunos meses, que para el 2025 habrá más de 75 mil millones de dispositivos conectados incluyendo electrodomésticos, televisores, teléfonos, dispositivos de monitorización deportiva, relojes, cámaras de vigilancia, routers, autos y otros pequeños sensores conectados a la red produciendo datos, lo que seguiría incidiendo en la intensificación de la velocidad del cambio y parece que hoy vamos más rápido de lo que se esperaba.
El internet de las cosas se relaciona con las personas conectadas con las cosas que están conectadas a internet.
Big data
Parece no haber límite para conseguir datos, pero el reto sigue siendo convertirlos en información valiosa para tomar decisiones, la posibilidad de llamamos Big Data es parte de esa posibilidad de comprendernos como individuos colectivos.
En la medida en que se desarrolla el Internet de las cosas, se capturan, almacenan y analizan suficientes datos para realizar análisis predictivos que incrementen el conocimiento de los consumidores particulares para dar seguimiento a sus comportamientos de compra y consumo.
Esto nos permite closterizar los datos para preguntarles dónde están los patrones y dónde los eventos y dónde las incógnitas que representan mayores oportunidades, además de medir y guiar los comportamientos en tiempo real, lo que ha generado un intenso debate que va a seguir intensificándose, pues las grandes transformaciones exigen ajustes estructurales y reformas profundas en la forma en que abordamos el derecho a la privacidad, la autonomía y la identidad.
Quinta generación
La implantación de redes móviles de quinta generación 5G, mejorarán la conectividad y reducirán significativamente el tiempo de latencia, proporcionando mayor velocidad y precisión.
Economía colaborativa
La economía colaborativa a través de dispositivos móviles como Uber, Cabify, Wesura, Airbnb y Eatwith seguirán creciendo y conectando directamente ofertantes y demandantes sin la intervención de intermediarios y sin limitaciones geográficas, ni de tiempos, lo que cambiará la forma de comprar productos y servicios de todo tipo.
Neurociencias
En distintos ámbitos científicos y empíricos se está constatando la posibilidad de cambiar la calidad de vida de las personas e inclusive su destino genético y a partir de la reprogramación de códigos mentales, a través de la reflexión activa, la introspección, la meditación, la repetición y la experiencia.
Es notorio en que además es un asunto que incide la industria editorial y autodidacta los temas de desarrollo personal se han cuadruplicado en las últimas dos décadas y se espera que seguirá creciendo a ritmos acelerados. Estamos cambiando como individuos y con preguntas sobre cómo está cambiando nuestra relación con los demás y con lo demás, con el entorno en que vivimos y con nosotros mismos, la forma como nos experimentamos cada día.
¿De aquí para allá?
La mayoría de los países seguirán buscando un balance entre la facilitación de los procesos fronterizos que favorezcan los desplazamientos internacionales de personas y mercancías para mejorar su competitividad, y también fortalecimiento de instrumentos que aseguren la seguridad y restrinjan el tránsito ilegal de personas como de mercancías, particularmente vinculadas con el narcotráfico y el crimen organizado.
Oportunidades del otro lado
La migración relacionada con la búsqueda de oportunidades hacia países o territorios o regiones más desarrollados, más seguras o más fértiles que ofrezcan real o perceptualmente una mejor calidad de vida sigue siendo tendencia. ¿Les suena como algo que comenzó hace unos pocos años o que vive desde las primeras páginas de nuestros libros de historia que hablan de la prehistoria?
Las migraciones derivadas de empresas trasnacionales que reubican a su personal con mejores condiciones y la posibilidad de vinculación trasnacional es una tendencia.
La ilegalidad de los desplazamientos de personas que migramos a lugares en los que prometen mejores espacios de vida y que tal vez nos necesitan para trabajar es un asunto que provoca inseguridad y hay asuntos que todavía no hemos logrado destrabar, ni comprender desde las distintas perspectivas de quienes debaten sobre los motivos y la normalidad de las migraciones.
Nómadas digitales
Los humanos vamos a seguir migrando entre países y regiones, todo parece indicar que las migraciones se van a intensificar con todo y la tecnología que nos permite entrar al terreno de ubicuidad; esa capacidad que era sólo de los dioses quienes tenían la capacidad de estar presentes en todas partes al mismo tiempo.
¿Les asombraría pensar en que crecerán los nómadas digitales que aprovecharán esa ubicuidad que permite la tecnología para trabajar de forma completamente remota y cambiarán de domicilio como de zapatos? ¿Y estas personas serán turistas permanentes, residentes temporales o ciudadanos del mundo?
Viajeros internacionales
El turismo propiamente dicho, si es que queda alguna propiedad en las definiciones acotadas, es considerado como un sector de servicios, una industria sin chimeneas, una actividad detonadora o un movimiento que afecta prácticamente a todos los ámbitos de la actividad humana y obviamente es también afectado por todo lo que sucede en el entorno.
En relación con el comercio internacional es el tercer mayor generador de intercambio de divisas del mundo y las predicciones de la OMT sugieren que podrá representar casi mil ochocientos millones de llegadas internacionales al 2030 y 3 mil millones de llegadas en 2050.
Viajeros connacionales
El impacto y las influencias del turismo internacional es menor que el turismo doméstico. A finales de esta década parece haber representado más del 70% del total del gasto de los viajes, y aunque existen diferencias importantes en las diversas economías, los connacionales son los principales impulsores de la actividad por muchos motivos.
Es difícil identificar en términos físicos o arquetípicos quién es un turista y quién no es un turista, aunque nos hayan tratado de meter en la cabeza que un turista más valioso tiene ciertos rasgos de raza y color.
Viajeros multimodales
La movilidad de los turistas hacia los destinos será influida por las motivaciones y las actividades de las personas que viajan, ya sea por negocios, entretenimiento, aprendizaje, aventura o descanso. Los viajeros son cada vez más multimodales, como en otras industrias, las barreras entre los segmentos está desapareciendo y las clasificaciones rígidas nos limitan e incluso nos llevan a equivocaciones.
Las principales oportunidades en el ámbito de los viajes también están en las intersecciones y la interpretación de los nodos y los enlaces. Así, han surgido nuevos conceptos como bleisure que combina negocios y placer, o glamping para definir los campamentos de alto lujo y existen millones de turistas no científicos que pueden disfrutar de una aventura científica del descubrimiento a la vez que hacen hiking o caminata deportiva y vivir una experiencia social a la vez.
Alojamiento temporal
El desarrollo del alojamiento no parece salir de las tendencias globales. Por supuesto la renta temporal de casas o cuartos en casas familiares que agilizan las tecnologías vinculadas con la economía colaborativa, de las que ya hablamos, seguirá creciendo sin que esto signifique que disminuya el hospedaje en casas de familiares y amigos.
Los hoteles serán más inteligentes, personalizados y especializados. También se desarrollarán nuevas alternativas hoteleras, pequeños desarrollos exclusivos y especializados, grandes complejos masivos, alojamientos móviles como los cruceros, las pequeñas embarcaciones, los campers. En todos los casos se utilizarán cada vez más dispositivos tecnológicos que permitan la personalización de la experiencia, que se relacionen con actividades locales e incorporen mecanismos orientados a la sustentabilidad.
Sobreturismo
El sobreturismo o saturación de turistas en algunas temporadas, que ha generado cambios en intensión de la búsqueda sin límites de visitantes con capacidad de consumo, pues los turistas no sólo compran productos y servicios hechos para ellos, también consumen agua y energía, saturan espacios públicos y compiten por los recursos locales.
La repulsión a los visitantes en algunas sociedades se ha exacerbado y las estrategias de contingencia son variadas. La mayoría coincide en la necesidad de incorporar herramientas tecnológicas en distintas magnitudes para establecer procesos de manejo de visitantes y de ciudadanos que permitan automatizar y hacer más eficiente la gestión urbana y turística.
Pandemias
Los efectos del COVID-19, que generó la necesidad de minimizar la movilidad humana, con la consecuente reducción casi total de la actividad turística, se ha convertido en una de las principales preocupaciones de quienes pretenden predecir el futuro en todas sus dimensiones, no solamente en el ámbito turístico.
Desde el siglo pasado se preveía que la apertura de fronteras y el tránsito libre de personas podrían incrementar los brotes, frecuencias e impacto de epidemias masivas o pandemias, lo que alteraría la vida de miles de millones de personas y transformaría en gran medida los estilos de vida y de consumo, tanto temporalmente como en el mediano y largo plazos.
Esta pandemia sin precedentes nos ha llevado a replantearnos, en lo personal y lo colectivo, lo que implica ser comunidad, pues ha puesto en evidencia los efectos de las decisiones de los demás en nuestra salud y nuestra vida, y en paralelo los efectos de nuestras decisiones en la salud y la vida de los demás y del planeta.
Los organismos más serios advierten que las proyecciones de futuro habrán de tomarse con precaución, y vigilar de cerca las tendencias emergentes porque los impactos de esta pandemia tendrán efectos en la economía, la sociedad y el medio ambiente que aún no logramos dimensionar.
Algunos estudiosos opinan que el turismo no volverá a ser igual, que las personas preferirán viajar virtualmente o que sólo se acercarán a los lugares que ofrezcan condiciones impecables que aseguren Susana distancia y estrictos protocolos de limpieza. Otros sostienen que la mayoría preferirá salir a la naturaleza para convivir de cerca con la biodiversidad. Otros más manifiestan que esta pandemia cambiará las formas de gestionar los viajes, que se establecerán programas de manejo que permitan controlar mejor los flujos e impactos de la actividad, lo que provocará una nueva forma de viajar más responsables y saludable tanto para los viajeros como para los habitantes locales y la naturaleza. Aunque también hay quien augura que el turismo regresará a los mismos niveles de crecimiento y los mismos viejos hábitos en cuanto se recupere la economía.
Existen diversas posibilidades para el futuro de la humanidad del que el turismo formará parte. Depende de decisiones individuales y colectivas que sucederán mañana.
¿Se olvidará el COVID-19 en unos años y seguiremos siendo los mismos de siempre en la práctica?
¿Algunas localidades aprovecharán la crisis para realizar cambios de fondo y marcarán la pauta para un mejor manejo del turismo, del urbanismo, la revitalización de la cultura, la biodiversidad y las relaciones entre las personas que comparten el espacio local?
¿Habrá diferentes resultados en función de cómo se gestione el cambio en cada localidad? Posiblemente sí y eso significará que nadie estaba equivocado.
¿Qué harás tú para que el futuro nos depare un mejor futuro?
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